Soledad

Son pocas, pero muy pocas las personas que pueden estar solas, que les gusta, y que están tranquilas en soledad. Si bien se dice que el hombre es un ser social y necesita de otros para vivir, también es cierto que para poder relacionarte con otras personas debes de conocerte a ti mismo. Saber de donde vienes y hacia donde vas, o eso se dice. Lamentablemente, ya sea por valores familiares o culturales, las personas no soportan la soledad, y es la gran mayoría.


Personalmente creo que mucho de este fenomeno tiene que ver con la publicidad, todo el impacto mediático que recibimos todos los días, promoviendo la idea de que estar solo es malo, que es parecido a ser rechazado por la sociedad, cuando realmente no es así. La falta de autoestima firme provoca que las personas se embarquen en relaciones que no tienen futuro o de las que resultan dependientes de la otra persona. Esto es mucho más palpable en el caso de las mujeres, aunque también hay hombres que se encuentran en esta situación y que repiten un patrón en cada relación que inician, esto aplica a ambos géneros.

Cuando las personas están solas por elección usualmente es para solucionar algún asunto y que necesitan de ese tiempo para aclarar sus emociones, sentimientos y cómo van a actuar, o que saben que de plano no funcionan en una relación. Aunque también hay que aclarar que a menos que se sea un ermitaño, nadie está completamente solo, se tiene familia y amigos, pero para poder llevar una relación sana tanto física como emocionalmete es indispensable conocerse, esto para cualquier tipo de relación, ya sea de amistad, afectiva o con los familiares. Conocerte bien te permite estar cómodo contigo mismo y no necesitar de la aprobación de otra personas y lo más importante te lleva a analizarte como persona y te permite crecer internamente.