La crítica más difícil

En general, el criticar algo es emitir una opinión sobre algún tema, ya sea como un juicio de valor u objetivamente, aunque ésta última no logra ser pura la mayoría de las veces, y todas las personas en algún momento de su vida han criticado algo, me sorprendería que no fuera así.

Cuando criticamos, pocas son las veces en que podemos dar una opinión con bases empíricas, es decir, opinamos sobre lo que nos venga en gana a veces sin tener la menor idea de lo que estamos diciendo o criticando; son pocas las personas que al emitir su punto de vista, sobre la situación de que se trate, pueden hablar con fundamentos base, ya que es tan fácil dejar que la boca siga su camino sin reconsiderar lo que de ella sale, como dice la Liebre loca: "Si no piensas no hables", es lo más recomendable.

Uno no tiene en cuenta que los comentarios que, posiblemente se hacen a la ligera, llegan a impactar tanto a la persona a la que van dirigidos que cambia el curso de las cosas, de tal forma que la persona que recibió el comentario o lo llegó a escuchar, reacciona tan contradictoriamente a su comportamiento usual o a su plan original que sorprende a las personas que lo rodean y conocen.

Por otro lado, el que una crítica se haga de frente a la persona que se está criticando o de manera pública en el caso de una situación, refleja una madurez de la que no todos gozan o han llegado a adquirir dicha capacidad, y con ello el que la crítica sea constructiva, no sólo identificar qué está mal, también tratar de mejorarlo, claro que esto es muy poco común entre los adolescentes, etapa en que casi todos criticamos por criticar, por encajar y encontrar afinidad con un grupo.

A fin de cuentas, la crítica más difícil es la que se realiza a uno mismo, puedes escuchar lo que los demás te digan sin realmente darle importancia, puedes esperar que alguien te sacuda y te abra los ojos pero hasta que tú no lo hagas por tu propia cuenta, no cambiará nada, esto en el caso de que realmente se realice una autocrítica, porque es muy fácil ver el error en lo ajeno y no en lo propio.

El pecado de Adán y Eva

Muy ad hoc con el inicio de la Semana Santa, el día de hoy tuve oportunidad de ver a Jorge Rivero en todo su esplendor en la película de "El pecado de Adán y Eva", la cual se basa en el pasaje bíblico en que Adán y Eva son expulsados del Jardín del Edén después de haber comido del fruto prohibido. Si bien no hay diálogo en toda la película, sólo algunas intervenciones de lo que se supone es Dios y la serpiente, y la expresión corporal, que en todo caso debería ser la que contara la historia, es bastante mala, sigo viendo esta obra del cine mexicano.

Jorge Rivero es un galán de los años sesenta y setenta, más o menos de la época de mi mamá, pero gracias a las películas en donde aparece en paños menores, algunas junto a Andrés García, otro hombre escultural; es que generaciones más jóvenes podemos apreciar de su atractivo natural. Lamentablemente, ya no los hacen así de guapos, bien formados y naturales.

La película que da nombre a esta entrada es muy importante, ya que sin temor a equivocarme, creo que es la primera película en México en donde se muestran desnudos frontales, y si no, sí debe ser de las primeras. Protagonizada sólo por Jorge Rivero y una chica que realmente no tengo idea de cómo se llama pero creo que era estadounidense, los dos se apegan bastante a la historia, y en ningún momento se da pie a interpretaciones morbosas o pornográficas.

Considerando la época en que fue hecha esta película, me sorprende que no esté censurada, aunque, claro, después de 40 años y con lo que hoy en día se transmite por televisión, ver a Jorge Rivero desnudo no resulta tan escandaloso e impactante. Aún así, habemos quienes pensamos y tenemos la esperanza de que hombres no metrosexuales y guapos como él existan.

De sabores, por favor.

Si bien se dice que en gustos se rompen géneros, o en custión de gustos no hay nada escrito, creo que la gente sigue ciertos cánones ya establecidos, tanto en lo estético, musical o social, líneas que ya han sido marcadas por otros, que podríamos decir vienen de la globalización y el efecto que ha tenido en la vida y preferencias de las personas.

Debido a diversas circunstancias personales, fue que empecé a pensar en que, a pesar de que la globalización con su modelo universalista de valores y usos culturales ha permeado, la decisión de ir por un lado u otro recae en la persona, en el individuo. Sin tocar el tema de las aptitudes o habilidades de las personas, creo que mucho de lo que hacemos o pensamos está determinado por el medio en el que nos desenvolvemos y lo que en dicho medio está considerado como los ideales a seguir, desafortunadamente, esto es impuesto y las personas lo adoptan desde su infancia; por ejemplo, en el caso de elegir una carrera universitaria (que es lo que toda tu familia espera) considero realmente imprudente que esta decisión se tenga que hacer a los 18 años formalmente, pero que la vayas planeando desde la secundaria, es totalmente ingenuo creer que un puberto preocupado por descubrir quién es y hacia dónde va, se tome el tiempo para decidir qué quiere en la vida.

De igual forma con la pareja, la sociedad te dice en qué es en lo que te debes fijar o qué es lo que debes buscar en una persona con la cual vas a disfrutar el "resto de tu vida", puedes tratar de enlistar cada uno de los aspectos con los que debe cumplir dicha persona, pero a la larga te das cuenta de que casi nadie cumple con todos los requisitos que pides y a fin de cuentas llega ser cuestión de química y valores socioculturales los que te van a llevar a estar con alguien a largo plazo.

Las decisiones tomadas van a perfilar nuestro futuro, pero no por ello tenemos que adecuarnos a lo que la sociedad diga, en cualquier momento nos podemos salir del esquema, lo único que no podemos obviar son las responsabilidades adquiridas y los compromisos concertados, ya que gracias a éstos es que vamos madurando y afrontando a quienes pensaban que no podíamos superarnos y asumir las consecuencias de dichas decisiones y al mismo tiempo sentirnos satisfechos.

¡Vuelve vuelve primavera!

Nunca había sentido tanto la llegada de la primavera, supongo que es a causa de tanta tarea, exámenes y trabajos, pero este fin de semana llegó la primavera como un nuevo respiro y como la canción de John Paul Young, la primavera se siente en el aire.

Y no sólo con respecto a el calor, sino que todo reverdece, los colores regresan al guardarropa y está esa sensación indescriptible de sentirse enamorado, pero no de una persona o varias, depende de cada quien, te enamoras de todo lo que está a tu alrededor. Está ese cosquilleo de hacer algo, de moverse, de sonreír, de sentirse vivo.

Tal vez fue que el invierno se sintió como un azote sobre mi estado de ánimo y que tanta desgracia ocurría a mi alrededor. Pero ahora, sin haber ido a Teotihuacán a tomar energía en la Pirámide del Sol, siento la recarga, el impulso y las ganas de seguir. De tener la voluntad y el ímpetu para continuar y agradecer por lo que tengo; como se dice que la violencia genera violencia, habría que cambiarlo a la buena vibra, la alegría y el amor.

Es hora de cantar: "Vuelve, vuelve primavera; vuelve, vuelve que te espero; mi triste corazón te dice: mi vida, yo te quiero a ti", como hace tantos años que no cantan Los locos del ritmo o Los crazy boys.

Ha llegado el momento de despertar y abrir los ojos, decir sí a las dudas, porque lo mejor está por venir, lo sé, al igual que las ninfas y los sátiros, el placer nos espera, tanto tiempo hemos aguardado y por fin estaremos juntos. La paciencia y tranquilidad quedaron atrás, sonríe y mira mis ojos, pronto te digo, muy pronto. Lo sientes en tu cabeza, tu columna va a estallar, no resistes las ganas de gritar y moverte, pronto, muy pronto.

¡Ah, café!

Debido a que esta semana la veo gris y ocupada, muy ocupada, encuentro que uno de los pocos momentos que me calman el día y en el que me doy mi espacio y mi tiempo para disfrutar, es cuando tomo café.

Una taza de café al día puede hacer la diferencia, y es que hay muchas personas que lo asocian a despertarse, a empezar el día y como un estimulante, pero yo no, a mí me gusta mi taza de café al despertar y antes de dormir, aunque una rica taza de café caliente después de comer no la rechazo, sobretodo si es café molido y hecho en cafetera, porque eso del instantáneo simplemente ya no me sabe y descafeinado menos, como me dijo un amigo: "el café descafeinado es como la leche deslactosada, simplemente agua"; claro que no por ello critico a las personas que los consuman, sólo que a mí no me gustan.

Curiosamente, al café, aparte de las asociaciones anteriores, en psicología lo relacionan con el sexo, algo que ha llamado mi atención últimamente porque no entiendo dicha relación. El café, según yo, como bebida tiene las características de ser caliente, con un dejo amargo, preferentemente sin azúcar para saborearlo debidamente y, sobretodo, que se toma despacio, muy despacio; y con respecto al sexo, bueno, en gustos se rompen géneros, pero estoy segura que no tiene que ser amargo, aunque a decir verdad, muchas relaciones terminan dejando ese sabor de boca; en este caso dejo a su consideración dicho análisis.

De cualquier forma, el café es delicioso, y gracias a la carga de trabajo de esta semana, que mejor que dedicarle una entrada a esta bebida que me acompaña todas las noches y algunas mañanas.

Phineas y Ferb

Aprovechando el fin de semana "largo", me dispuse a ver la televisión en la mañana y casualmente dí con la última caricatura que me ha gustado tanto hasta el punto de aprenderme las canciones, claro como buena niña de la generación Disney, me aprendo todas las líneas y frases de las series que me hacen reír, pero el caso de Phineas y Ferb es diferente, ya que de las caricaturas que han salido al aire en los últimos años no tienen nada que ver con las de cuando yo estaba chiquita, ni siquiera con las japonesas.

Las caricaturas actuales ya no cuentan con una historia sólida y no se muestra un trabajo pulcro por parte de los dibujantes, parece que con el diseño por computadora se suplió el dibujo clásico, o éste último se ha vuelto de los más rústico y sin chiste, sin detalles, que no invitan a los niños a apreciarlo y todo ello se ha recuperado y mejorado con Phineas y Ferb.

Se trata de dos hermanos, bueno medios hermanos, que durante el verano se dedican a hacer algo diferente cada día hasta que tengan que entrar a la escuela, y el "hacer algo diferente" engloba todo, desde construir una playa en el patio trasero hasta competir en la Fórmula Uno a su corta edad, porque en ningún momento se especifica la edad; y su hermana mayor, Candace, siempre trata de acusarlos con su mamá aunque nunca lo consigue. Y como toda familia estadounidense, tienen una mascota: un ornitorrinco llamado Perry, que resulta ser un espía secreto que lucha contra el malvado Doctor Doofenshmirtz, quien planea hacer algo "malvado" en toda el área limítrofe. El aspecto de que Ferb sea el medio hermano de Candace y Phineas sólo me da pie a pensar que Ferb es resultado de un desliz del papá, porque a leguas se nota el parentezco, y que se lo hayan dejado, misterio que a la fecha ni mi hermana ni yo hemos podido dilucidar, pero a fin de cuentas no es tan relevante como las aventuras de los hermanos.

Lo que más me gusta de esta serie es que cada capítulo está acompañado de una o dos canciones, que si bien no son de los más común o típicas de Disney, entretienen y son muy pegajosas, aquí les dejo una, la cual es mi favorita y ojalá les incite a buscar los capítulos por Internet o si cuentan con Disney Channel, que la vean.

Día internacional de la mujer

A dos días del día internacional de la mujer, y porque hoy tuve un poco de tiempo, aprovecho la coyuntura de ese día con el blog para escribir algunas consideraciones acerca de las mujeres. Aunque lo quiera disimular, no puedo, tengo que decir que somos perfectas, o nos encontramos muy cerca de la perfección, a pesar de que no quisiera generalizar, las mujeres somos la mejor creación de este mundo, claro, como en todo hay sus excepciones.

El día internacional de la mujer tiene como fin el dar a la mujer el papel que le corresponde dentro de la sociedad y no menos que eso, que se recupere el concepto de dignidad e igualdad con respecto al hombre, por ello es muy importante mencionar que esta celebración (por llamarlo de alguna forma) tiene como base el pensamiento occidental, en el que la mujer ha sido constantemente degradada, desde trabajadora hasta objeto sexual, y con este día se trata de reposicionar a la mujer en todo los ámbitos.

Fuera del discurso feminista, porque no creo que las mujeres seamos mejores que los hombres, simplemente somos diferentes y como tal entre hombres y mujeres nos complementamos, aunque hoy en día vemos que esa situación está cambiando drásticamente (entramos en la crisis de falta de hombres guapos, heterosexuales y decentes); la mujer en sí es lo más cercano a la divinidad, somos capaces de dar la vida (con un poco de ayuda del hombre, se debe reconocer) e incluso en el arte somos la inspiración en pintura, escultura, poesía y no se diga de la música, somos el ser que todo hombre desea, aprecia y quiere junto a él.

Gracias a que se le dé difusión a días como estos, que debería ser todo el año, es que se cae en cuenta de la situación que sufren muchas mujeres alrededor del mundo y en nuestro país, en materia de pobreza, marginación, discriminación y abuso sexual, y que da pauta a que se volteé la mirada y se propongan soluciones a estos problemas.

Music is in the heart

Cada momento de nuestra vida sucede en determinada época, y tal vez sea por la influencia de las películas, pero creo que esos momentos deberían de estar acompañados de su soundtrack particular, como dice la canción de Pink: "if God is a dj, life is a dancefloor, love is the rhythm, you are the music", la música es el acompañante ideal, ya que las melodías, sobre todo las acompañadas de letra, describen o se acoplan perfectamente a ese momento de nuestras vidas, inmortalizándolo de alguna manera.

Yo no creía en esto de que la música nos acompaña, tal vez es la condición humana, con esto quiero decir que la música tiene un efecto en las personas y en sus sentimientos, dependiendo de la situación en que se encuentre, casi siempre se encuentra una canción y se le adjudica que todo lo que uno siente, la canción lo tiene. Permítanme explicarlo, hay tantas canciones o melodías como personas diferentes en el mundo, si no es que más, pero algunas de ellas tienen tal repercusión que llegan a marcar un año, un momento o incluso una generación entera, usualmente decimos, cuando escuchamos cierta canción, esa es la canción de mi boda, de mi primera vez, del viaje de generación, etc.

Pero no es sólo en los casos anteriores en los que recurrimos a la música, sino también para intensificar sentimientos o emociones, y esto es tan curioso que una vez que me lo comentaron empecé a observar a mi alrededor y conmigo misma que sí es verdad, o al menos si aplica a muchos casos de estudio (!). Cuando una persona está feliz o acaba de salir de fiesta o casos del mismo estilo, escucha música con un ritmo acelerado, rápido y con muchos cambios dentro de la misma melodía; en cambio, si es alguien que se siente triste o deprimido, recurre mucho a canciones melancólicas y con un lento ritmo, es como echarle sal a la herida. Por ello no es sorpresa que muchas canciones, sobre todo si son el éxito de la temporada, sea tomada por alguien como "su" canción.

De cualquier forma, creo que todos deberíamos tener una canción que exprese nuestra identidad individual, nuestra personalidad, esa que no importa cómo te sientas, sabes que es la representación musical de tu persona, que al escucharla sientes que grita tu nombre, no hay nada como eso, aunque reconozco que todavía me falta encontrar la mía.

El perfume

No, no es una entrada referente a la novela de Patrick Süskind, esta entrada está dedicada a todos esos aromas que vienen en pequeñas botellas, que a muchas mujeres nos encantan. Cada persona cuenta con un olor propio, una esencia desde que nacemos, cuestión de química dirán algunos, y tienen razón, es cuestión de química.

El perfume es parte esencial de todo el ritual de presentación, es el toque final, el que hace que todo encaje, el accesorio nunca visto pero el que más se recuerda. Tanto en hombres como en mujeres, el perfume o colonia tiene que ir de acuerdo con la persona, con su piel, su olor propio y en último de los casos, con su forma de ser. A pesar de qué tanto se mercantilice, el perfume sigue siendo una de las características fundamentales de las mujeres, cada una de las notas frutales, silvestres, dulces o de maderas que despide cada gota de perfume tiene por objetivo crear la diferencia entre la mujer que se lo coloca y el resto.

La energía que puede transmitir el perfume a lo largo del día es indescriptible, es una especie de cápsula que te hace sentir bien y cómoda estés donde estés, y no sólo eso, el perfume da cuenta de lo que quieres transmitir en los demás, del efecto que pretendes provocar, no en valde se dice que una mujer debe colocarse perfume en las partes del cuerpo donde desee ser besada.

¿Qué tanta influencia no puede tener el perfume, si cuando no traemos sentimos que nos falta algo? El perfume ha llegado a ser tanto parte de nosotros, de ese ritual en el que nos preparamos para enfrentar el día, que llega a ser una segunda piel. Lamentablemente, esto bien lo sabe la mercadotecnia, por lo que no es sorpresa que se aprovechen de ello para acrecentar ventas o promocionar ya cualquier aroma, incluso cuando no tiene un aroma muy agradable. A pesar de ello, sigo creyendo que el perfume es el elemento extra, el plus, en la vestimenta y la actitud de las personas.